Por: Fidelicia Flores
La explotación minera del Cerro Blanco en Guatemala, ha ocasionado diversas opiniones, ya que esta puede contaminar la principal fuente de agua para los salvadoreños, el Río Lempa; que abastece aproximadamente a unos 3 millones de habitantes, con el vital líquido. Esta problemática con anterioridad ha sido declarada como “gravísima” para la nación salvadoreña.
Se ha hecho conocer que el proyecto minero transfronterizo entre El Salvador y Guatemala, en el Cerro Blanco, está suspendido temporalmente.
La Mesa frente a la Minería, informó que la semana pasada, la empresa minera de origen canadiense Goldcorp Inc., citó un contexto financiero; poco favorable para la inversión en minería metálica a nivel global.
Y fue como anunciaron la suspensión temporal del emblemático proyecto transfronterizo Cerro Blanco y otros dos mega proyectos de su propiedad. La mina Cerro Blanco está ubicada en Asunción Mita, Jutiapa, Guatemala, a 14 kilómetros del Lago de Güija con el que conecta a través de los ríos Ostúa y Angué.
Ante ello, consideraron que la empresa estaría en proceso de reflexión, por la suspensión en dicho proyecto; “Notros creemos que también hay un cálculo de la empresa en querer desmovilizar la resistencia”, así lo calificó, Edgardo Mira, representante de la Mesa Nacional frente a la Minería Metálica.
Asimismo, Mira, explicó que la suspensión prevé que los luchadores como los salvadoreños y guatemaltecos “se confíen” en que la problemática esté finalizada, “Vemos esto como una gran oportunidad, para que las organizaciones sociales, las comunidades de los dos países precisamente fortalezcamos nuestra lucha, demandando el cierre definitivo del proyecto, cuestión que le corresponde al gobierno de Guatemala” , enfatizó.
Además hicieron un llamado claro a las organizaciones sociales y comunidades afectadas, para que se unan en este esfuerzo; que es el cierre definitivo de dicho proyecto, “Que las comunidades guatemaltecas y salvadoreñas junto con organizaciones sociales de ambos países, demandamos al gobierno de Guatemala; el cierre definitivo del proyecto de la mina del Cerro Blanco”, instó Bernardo Belloso, miembro de la Mesa.
Por otra parte, Belloso, señaló que el proyecto del Cerro Blanco que afecta a ambas naciones, no tiene “viabilidad técnica y socio ambiental”, ya que dijo que esto está probado, para ellos no es viable que la suspensión del proyecto sea temporal, ya que se debe de anunciar el cierre definitivo.
Los representantes de la Mesa, también exigen al gobierno salvadoreño que fortalezca su posición y exigencia, ante el gobierno de Guatemala, en pro del cierre definitivo del proyecto Cerro Blanco.
Para Belloso está claro que a esta problemática se le debe de sacar provecho, para concientizar a ambas naciones, “La mina Cerro Blanco, es apenas uno de los 49 proyectos mineros transfronterizos; este caso debería de servir para impulsar de manera urgente y a nivel regional; diálogos y convenios para el manejo integral y sustentable de las aguas transfronterizas y cuencas hidráulicas compartidas”.
Aunque, la suspensión se haya dado, los representantes de la Mesa, consideran que podría ser por la resistencia de la gente, en esto incluyen a las comunidades, organizaciones, grupos religiosos y sobre todo la ayuda internacional, además reconocieron la lucha que hacen para frenar por total este proyecto.
Así también, enfatizaron que la suspensión de la mina Cerro Blanco no es solo resultado de un frío cálculo comercial como asegura la empresa. Tal como ha sucedido en el caso de la mina mexicana Peñasquito, otra de las minas que Goldcorp suspenderá en este periodo, se evidencia que existen procesos de lucha y resistencia por parte de comunidades que prefieren defender el agua y su territorio, impulsando con decisión reivindicaciones sociales y culturales.
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